Las aceitunas verdes se recogen con cuidado para que el fruto no resulte dañado (las pequeñas marcas que puedan ser ocasionadas en la aceituna durante la recolección se denominan “molestado”). Después, nuestras aceitunas son “curadas” mediante un proceso que elimina el amargor natural característico de la aceituna cruda y se conservan en salmuera. Las aceitunas verdes son muy adecuadas como aperitivo o para añadir un toque sabroso y saludable en cualquier receta.
La campaña de recolección tiene lugar entre los meses de septiembre y noviembre. La aceituna es cuidadosamente recolectada por nuestros agricultores para ser llevada desde cada cooperativa hasta nuestra fábrica.
Las aceitunas son lavadas y almacenadas en depósitos, se clasifican según su calibre (número aproximado de aceitunas contenidas en un kg) y se retiran aquellos frutos que no cumplan nuestros exhaustivos controles de calidad.
La aceituna “cruda” es sometida a un proceso de cocción para eliminar el amargor; después se almacena en depósitos para comenzar una fermentación natural controlada que durará entre tres y cinco meses.
Se realiza según la presentación final de la aceituna: entera, deshuesada, rellena o en rodajas.
Envasamos nuestras aceitunas verdes en latas, bolsas y frascos de vidrio de diferentes formatos.
Para garantizar que la aceituna mantiene todas sus propiedades nutritivas, aspecto y sabor, sometemos el producto envasado a un proceso de pasteurización.
Cada envase es etiquetado y posteriormente embalado en cajas; después de esta fase, nuestras aceitunas están listas para ser enviadas a cualquier país del mundo.
Las aceitunas son de color verde cuando se recogen directamente del olivo, pero mediante un proceso de oxidación, que acelera la maduración natural del fruto, conseguimos que adquieran el tono negro en la piel y marrón en la pulpa. Su sabor suave combina a la perfección con cualquier otro ingrediente, lo que las hace muy adecuadas para preparar pizzas, bocadillos, platos de pasta, etc.
Las aceitunas se recogen del olivo coincidiendo con la estación de otoño; después son transportadas con cuidado a la fábrica para que lleguen en perfecto estado.
Las aceitunas son lavadas y almacenadas en depósitos, se clasifican según su calibre (número aproximado de aceitunas contenidas en un kg) y se retiran aquellos frutos que no cumplan nuestros exhaustivos controles de calidad.
La aceituna sigue un proceso de oxidación con el que se acelera la maduración natural del fruto, hasta alcanzar el grado óptimo para su consumo.
Clasificación de la aceituna según las diferentes preparaciones y la presentación final de cada producto: entera, deshuesada, o en rodajas.
Envasamos nuestras aceitunas negras en latas, bolsas y frascos de vidrio de diferentes formatos.
Para garantizar que la aceituna mantiene todas sus propiedades nutritivas, aspecto y sabor, sometemos el producto envasado a un proceso de esterilización.
Cada envase es etiquetado y posteriormente embalado en cajas; después de esta fase, nuestras aceitunas están listas para ser enviadas a cualquier país del mundo.